Si leyeron la historia 1 se acordarán de el humo saliendo de la chimenea y de Carmelita la sirvienta.
El cuarto donde dormía Carmelita estaba exactamente del otro lado de la chimenea.
Carmelita me llegó a platicar que en las noches la levantaban con todo y cama, la dejaban caer y que además casi nunca la dejaban dormir.
Ella duró varios años trabajando en ésta casa y ponía veladoras y le rezaba a los espíritus para que la dejaran en paz, pero no le funcionó y mejor se fué.
martes, 12 de febrero de 2008
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