Acababa de cumplir 3 años cuando falleció mi abuelo, pero me platicaron que casi toda la familia incluyendo a dos de mis tios nos encontrábamos en unas cabañas en San Luis Potosí de vacaciones. Estas cabañas eran de madera muy gruesa y pesada y debido a la humedad la madera estaba hinchada por lo que era difícil abrir y cerrar las puertas y ventanas, sólo entre varias personas lo lograban.
El 16 de septiembre a cierta hora de la madrugada en la cabaña donde nos encontrábamos mis padres, mis hermanas y yo, comenzó a haber mucho viento y tan fuerte, que las ventanas y puertas se abrieron y cerraron por algunos minutos y después todo volvió a la calma, claro dicen que el susto no se quitó tan rápido.
Al día siguiente habló por teléfono el único tío que se quedó en México con mis abuelos para decirnos que teníamos que regresarnos lo antes posible a México pero no quería decirnos porqué, ya después nos enteramos que a la hora que pasó lo del viento fué la misma hora a la que murió mi abuelo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario